El presidente Miquel Bestard ha estado en constante contacto con el director general de Deportes del Gobierno de las Islas Baleares, Carles Gonyalons. Ambas instituciones, Gobierno y FFIB, se muestran consternadas por los dos hechos violentos ocurridos al fútbol en pocos días.
A la agresión múltiple entre el Campos y la Penya Arrabal de juvenil preferente de este sábado (con invasión del público incluida y batalla totalmente condenable al césped), se le suma la agresión de un jugador de 23 años hace unos días.
Como se recordará, la semana pasada, un jugador del Son Sardina B agredió brutalmente con un puñetazo sin ninguna justificación a un jugador del Athletic Huialfàs. La sanción deportiva se está decidiendo por parte del Comité de Competición, mientras que el ya ex club, el Son Sardina, tomó la ejemplar decisión de darle la baja federativa y cerrarle las puertas como futbolista tanto para entrenar como para jugar.
Competencias
La Federación de Fútbol quiere recordar dos aspectos nivel de sanción. De una parte, será el Comité de Competición, una vez analice el acta arbitral, el organismo calificado para sancionar los posibles agresores o incitadores del partido. Por otro lado, en los incidentes de ayer a Campos por lo que respecta a la invasión colectiva del público para agredir, corresponde a la Comisión de Antiviolència de la Dirección de Deportes del Govern la sanción económica a todas aquellas personas que hayan sido identificadas.
La FFIB quiere recordar que hace todo el posible para erradicar la violencia a los campos de fútbol de las islas. Primero, ha creado los dos últimos años una edición del Congreso de Fútbol Base, con ponentes expertos en el ámbito educativo y en valores. Solo haciendo pedagogía desde muy pequeños será posible que no haya violencia al deportes.
Por otro lado, la Federación lleva semanas aplicando el coordinador o coordinadora de grada, en categoría de prebenjamí hasta cadete. Es una figura rotatoria, un padre o una madre de cada equipo que llevan una acreditación colgada como ‘coordinador de grada’ para hacer entender a los padres y las madres que asisten de público que no pueden impulsar ningún tipo de violencia, ni verbal ni mucho falto física. Esta medida no se aplica a categoría juvenil, porque se considera que el problema se más fácil de solucionar desde edades más prematuras, impulsando valores porque los futbolistas los apliquen cuando compiten.