Los hechos ocurrieron este lunes cuando un joven discapacitado, tras una discusión con sus padres, subió a la azotea de su casa en Santa Margalida con ideas suicidas. Un guardia civil y un polizei alemán lograron in extremis salvarle la vida.
La central 062 de la Guardia Civil recibió una llamada en la que los alertaban de que había un joven que pretendía tirarse desde una altura equivalente a un cuarto piso.
Una patrulla de seguridad se desplazó al lugar y subieron a la terraza de la vivienda donde encontraron al chico en un gran estado de nerviosismo tras haber discutido con sus padres. Se hallaba junto a la cornisa del edificio con intención de saltar. Entablaron conversación con él para tranquilizarlo y ganarse su confianza; fueron acercándose despacio para no asustarlo, pero él se sintió acechado e hizo ademán de saltar; ese fue el momento en el que intervinieron los dos agentes, que se abalanzaron sobre él consiguiendo retenerlo y evitar la caída.
Una ambulancia lo trasladó hasta el Hospital de Inca donde quedó ingresado en psiquiatría debido al estado de ansiedad que presentaba.