La menor se dirigió a coger comida del buffet mientras su abuela la esperaba en la mesa cuando el hombre se le acercó por detrás y cometió los abusos sexuales.
La menor sorprendida se giró y el hombre lo volvió a intentar mientras reía, mirándole de arriba abajo y haciéndole gestos para que le acompañara.
La chica se echó a llorar y se marchó a la mesa buscando el amparo de su abuela. El hombre le siguió y la abuela le recriminó.
Varios testigos al ver lo sucedido mediaron y le exigieron que dejara de realizar tocamientos, solicitando la presencia del vigilante y de una patrulla policial. Finalmente fue detenido.