El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha abierto el debate de investidura pidiendo que se facilite la formación de su Ejecutivo, ofreciendo para ello "un pacto de Estado" para reformar el artículo 99 de la Constitución y evitar el bloqueo institucional, y lo ha finalizado pidiendo a Unidas Podemos su apoyo: «Nada que merezca la pena es fácil, y lo que tenemos por delante merece mucho la pena», ha dicho Sánchez en su mensaje al partido de Pablo Iglesias.
Pedro Sánchez ha arrancado su discurso proponiendo la reforma de la Constitución para que los españoles no tengan que "sufrir la amenaza de la repetición electoral", citando el modelo de constitución de los ayuntamientos y de algunas comunidades autónomas. Afirma que su propuesta busca que el Ejecutivo "tenga garantías para poder ser constituido y reforzar la estabilidad del sistema". "No se trata de elegir entre izquierda y derecha, estamos eligiendo entre que España tenga Gobierno o no", ha insistido el candidato del PSOE
En su discurso en el Congreso de los Diputados, Sánchez también ha apelado a combatir los seis grandes retos, que a su juicio, tiene España. "Frente al desempleo, empleo digno; frente al reto tecnológico, transformación digital; frente al cambio climático, transición ecológica; frente a la discriminación de la mujer, feminismo; frente a la desigualdad, justicia social; y frente a los desafíos globales, una España unida", ha subrayado.
Sánchez ha recordado que el pasado 28 de abril los españoles votaron para "avanzar" no para "retroceder" con los pactos que se están llevando a cabo de PP y Cs con Vox en ayuntamientos y comunidades autónomas. En su opinión, estos acuerdos "cuestionan" las libertades y derechos civiles de las minorías" y también "banalizan" la lucha contra la violencia de género.
Otra de las propuestas que Sánchez ha explicado en el Congreso es la de llevar en los en los "próximos meses" un nuevo Estatuto de los Trabajadores "para las nuevas generaciones, que sea "solvente" y que dé "seguridad jurídica" a todas las partes. Además, ha propuesto un "estatuto del becario", que proteja a los que "dan los primeros pasos en el mercado laboral" para evitar el "encadenamiento prolongado del periodo de prácticas".
También ha planteado un pacto entre las diferentes formaciones políticas para destinar el 5% del PIB español a la inversión en educación "con independencia de la coyuntura económica y de los gobiernos de los años sucesivos".