Por el momento, ningún grupo ha reivindicado la autoría del incidente. Irak es un país marcado por la violencia aunque el Gobierno declarase en diciembre de 2017 la victoria frente al grupo terrorista Estado Islámico, el cual ha llegado a controlar grandes partes del territorio en la zona norte y en el oeste del país.
Por su parte, el grupo de Abu Bakr al Baghdadi sigue cometiendo atentados contra objetivos gubernamentales, aunque haya perdido el dominio de sus territorios.
Mientras tanto, las autoridades del país siguen luchando contra las células que se mantienen activas.