La Organización de Naciones Unidas (ONU) registró alrededor de 260 denuncias de abusos y explotación sexual por parte de su personal en 2018. Se trata de un número superior al de los años anteriores, que según António Guterres, evidencia un aumento de la confianza entre las víctimas y testigos y que cada vez hay mayor conciencia de que es un tema que no se puede ocultar y debe salir a la luz pública.
En este sentido, en 2018 el Departamento de Apoyo a las Actividades sobre el Terreno preparó un conjunto de instrumentos de gestión del riesgo de explotación y abusos sexuales para que las operaciones de paz detecten y evalúen los riesgos. Se trata de un marco exhaustivo que incluye herramientas prácticas, como un plan de trabajo y un registro de riesgos, que se pueden adaptar a las condiciones de cada operación. He dado instrucciones a la Coordinadora Especial de que se amplíe el conjunto de instrumentos para su uso en toda la Secretaría en 2019.
El número de casos denunciados de explotación y abusos sexuales en misiones de mantenimiento de la paz y misiones políticas especiales ha disminuido (54 denuncias 24 en 2018, frente a 62 25 y 104 en 2017 y 2016, respectivamente). La mayoría (el 74 por ciento) de las denuncias presentadas en 2018 procedían de la MINUSCA y la MONUSCO; el 26 por ciento restante estaban relacionadas con la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de las Naciones Unidas en Malí, la MINUSTAH, la Misión de las Naciones Unidas en Liberia y la UNMISS. No se recibieron denuncias relacionadas con las misiones políticas especiales. Las denuncias presentadas por actos cometidos en misiones de mantenimiento de la paz afectaban a 94 víctimas, de las cuales el 83 por ciento eran adultos y el 17 por ciento, niños. Los supuestos autores eran 64 efectivos militares, 14 agentes de policía y 14 miembros del personal civil. De las denuncias presentadas en 2018, 20 (el 37 por ciento) eran por abusos sexuales y 34 (el 63 por ciento) por explotación sexual de adultos 26.
“La no presentación de denuncias que implican a personal de otras entidades de las Naciones Unidas y a personal ajeno a la Organización al trabajar con asociados en la ejecución sigue siendo motivo de preocupación (véase A/71/818). En 2018 se presentaron 94 denuncias contra personal de las Naciones Unidas en entidade s ajenas al mantenimiento de la paz. Ha aumentado la presentación de denuncias contra personal de asociados en la ejecución, pasando de 25 en 2017 a 109 en 2018, lo que indica que las actividades de sensibilización y divulgación están teniendo efecto, que aumenta la confianza de las víctimas”, expone en su informe.
En la ONU se fortalecieron los métodos y procesos de investigación, “en particular mancomunando las capacidades de investigación, la Oficina de Servicios de Supervisión Interna (OSSI), que ocupa la presidencia del equipo de tareas permanente sobre el mejoramiento de las investigaciones de los casos de explotación y abusos sexuales de los Representantes de Servicios de Investigación de las Naciones Unidas, dirigió la elaboración de un proyecto de principios y directrices uniformes para esas investigaciones que se ultimará en 2019”.