Los datos son escalofriantes. La ONG Ayuda en Acción advierte de que cada año más de tres millones de mujeres son víctimas en el mundo de la mutilación genital y la previsión es que puedan llegar a ser 4,5 millones en el año 2030.
Aunque no se puede tener una cifra exacta, se calcula que unos 200 millones de mujeres y niñas actualmente han sufrido estas mutilaciones en 30 países africanos, Oriente Medio y Asia.
Esta práctica puede conllevar complicaciones físicas como hemorragias, infecciones, problemas menstruales, coitos dolorosos, y complicaciones en el parto que pueden resultar en la muerte del recien nacido.
Las consecuencias no son únicamente físicas ya que esta práctica produce trastornos psicológicos como depresión o estrés postraumático.
Ayuda en Acción, junto a la Fundación Kirira, trabaja contra la mutilación genital femenina desde 1985. El arma más eficaz para luchar contra las vulneraciones de los derechos de las mujeres y las niñas es la educación.
Trabajan en 85 escuelas creando clubs antiablación dirigidos por niñas que lograron escapar de la mutilación y que han cursado estudios universitarios. Sin duda, estas mujeres son las que mejor pueden narrar los peligros y consecuencias de la ablación a niñas y familias.