Los hechos ocurrieron en el mes de agosto del año pasado en una finca de Llucmajor. Según relata el responsable de la perra, B. Adrover, estaban pasando una jornada de caza en la finca de Son Mut cuando el animal salió corriendo detrás de un conejo y se coló en la finca adyacente. Fue entonces cuando el dueño de la propiedad, ahora imputado de un delito de maltrato animal, cogió una escopeta y le pego un tiro a cinco metros, según su versión, para defenderse, algo que Adrover niega rotundamente asegurando que la perra "no era peligrosa y jamás atacaría a un humano".
Adrover lamenta que acabasen con la vida del animal "la más lista y buena que tenía para cazar". De hecho, él reclamaba una cantidad superior de indemnización pero Fiscalía la ha rebajado.
El juicio se celebrará este miércoles en los Juzgados de Via Alemania.