Tras conocerse el informe que acusa a Molina de presuntas irregularidades y sobrecostes en el cobro de subvenciones del SOIB, Armengol ha dicho que "ya se han dado explicaciones por parte del afectado" y por parte del alcalde, Rafa Ruiz, que "hoy mismo" ha anunciado la remodelación del equipo de gobierno.
"Tenemos un gran equipo de trabajo en el Ayuntamiento de Vila, que está haciendo un trabajo magnífico, que está tirando adelante un proyecto de cambio importante en esta ciudad y que, evidentemente, ha contado con el trabajo magnífico del compañero Alfonso Molina, que ha dado todo lo mejor de sí mismo para poder hacer esta realidad de cambio en la cuidad de Ibiza", ha destacado Armengol.
La presidenta no ha querido pronunciarse sobre la petición de explicaciones del alcalde de Vila a la Conselleria de Trabajo que dirige el también socialista Iago Negueruela por la filtración del informe, y ha insistido en que "las instituciones tienen que trabajar siempre según la norma", con independencia de la persona afectada. "Lo funcionarios hacen su trabajo y el administrado tiene el derecho de recurrir", ha insistido.
Preguntada si considera que Molina debía dimitir, Armengol ha respondido calificando al exteniente de alcalde de "magnífica persona de partido y, además, comprometida con el proyecto y la ciudad a la que representa". "Cuando ha creído que era mejor dar un paso atrás para continuar con su defensa y para que el ayuntamiento siguiera tirando adelante con las políticas necesarias de los ciudadanos lo ha hecho y lo respeto", ha concluido.
Molina ha abandonado el cargo tras las informaciones publicadas por Periódico de Ibiza sobre el contenido de un informe del Servei d’Ocupació de les Illes Balears (SOIB). En dicho documento se reclama a Molina un total de 27.133,14 euros de una subvención concedida a la empresa Serviconsult Training and Development, para cursos de formación a parados impartidos entre 2009 y 2011, en la que el SOIB detectó irregularidades.
Concretamente el SOIB acusa a Molina de subcontratar empresas de un «entramado societario» de las que él mismo es el «nexo de unión», con el objetivo de hinchar los costes y aumentar el beneficio económico. Así los sobrecostes se habrían detectado tanto en el personal docente como en el material didáctico e incluso en el alquiler del local donde los cursos se impartían.