Así, el empresario ha asegurado este lunes en Londres que las consecuencias del Impuesto de Turismo Sostenible se verán a medio-largo plazo y ha criticado la "decisión política" de duplicar el importe en un año, sin siquiera contar con el sector.
De este modo, se suma a las críticas que su padre y fundador del Grupo Meliá, Gabriel Escarrer, ya hiciera en la inauguración del Palau de Congressos de Palma, cuando afirmó que "la subida de la presión fiscal no es el camino".