"Esta revisión del catálogo sólo tiene un objetivo: incrementar la protección patrimonial y la estima de la ciudad", ha dicho Noguera sobre las 162 nuevas incorporaciones al catálogo vigente, que está formado por más de 500 elementos.
Ha detallado que la revisión se ha llevado a cabo tras detectar graves carencias en el listado, así como la "exigencia ciudadana" de proteger el patrimonio.
La ampliación presentada hoy recoge la mayor parte de las edificaciones que fueron objeto de suspensión de licencias en el pleno de junio del año pasado, además de otros que se han incorporado a sugerencia de varias entidades como la Comisión de Centro histórico, el Colegio de Arquitectos o la Asociación para la Rehabilitación de los Centros Antiguos (ARCA).
Noguera ha explicado que hasta ahora el catálogo se centraba en los elementos más monumentales y del centro Histórico, por lo que se ha revisado a partir de un enfoque más amplio del concepto de patrimonio, introduciendo edificios y elementos inmuebles de diferentes barrios y núcleos tradicionales de la ciudad.
Se han incluido tanto obras de nueva planta como intervenciones nuevas en edificios monumentales que ya gozaban de protección, como la intervención del arquitecto Elías Torres en el Castillo de Bellver o en Ses Voltes.
Los jardines de Son Berga, el conservatorio, la iglesia y el convento de Dominiques, las parroquias de la Encarnación, Sant Jordi, la Mare de Deu del Carme y Sant Alonso Rodríguez, la guardería del Molinar y el colegio del Coll den Rabassa son otros elementos protegidos.
También se han protegido establecimientos como el Café Líric, la bombonería La Pajarita, el Forn de sa Pelleteria, Casa Roca, el hotel Araxa, Can Granada, el Molí del Comte y Ca es Monges.