"Todas las mañanas amanecemos así", explica una vecina de Platja de Palma que hace llegar a mallorcadiario.com estas imágenes. Cartones, vidrios, basura, incluso tumbonas y señales de tráfico. El incivismo de los ciudadanos y la falta de respuesta de la Administración permiten que la suciedad se siga acumulando en torno a los nuevos contenedores.
Y es que los recipientes no tienen ni dos semanas de vida. Emaya finalizó la renovación de los mismos en la zona el pasado mes de mayo: en total, 653 contenedores en el Arenal, las Maravillas y Can Pastilla, que corresponden a las fracciones de rechazo, papel y cartón, vidrio y envases ligeros.
Según explica Emaya, los contenedores son accesibles para cualquier persona, sea cual sea su edad y condición física, de fácil apertura (con palanca para personas con silla de rueda y pedal de pie), están señalizados para personas invidentes, cumplen la normativa y los requisitos de accesibilidad.
De forma paralela a la instalación de los nuevos contenedores se implantará un sistema de limpieza diario de las áreas de contenedores, con vehículos que realizarán rutas previas a su vaciado y cada mes se limpiarán por fuera y cada tres meses por dentro.
Sin embargo, el plan no está siendo del todo efectivo a la vista de estas imágenes.
Junto a estas quejas, los vecinos insisten en las constantes escenas de mal gusto provocadas por turistas que acuden a determinados locales de la zona y que prolongan la fiesta desenfrenada y el consumo de alcohol en las zonas públicas de los alrededores.