A más problemas, más impuestos

Esa es la fórmula mágica de nuestros políticos. Que hay demasiada gente que va a las playas, ponemos zonal azul y a recaudar como se acaba de acordar para la Calobra, el probelma no lo arreglaran, pero haran mas caja y los más pudientes podrán ir sin masificación, ya que el padre de familia con el utilitario no lo podrá pagar.

Pero no son hechos aislados, viene pasando desde hace años en Soller, entre el palo que te meten en el tunel y la zona azul que abarca todo el pueblo, es un lujo este destino nuestro. Y en muchas playas toca pagar por todo, salvo si llegas en yate que no pagas hora, ni hamaca, ni sombrilla y estás todo el tiempo que quieras.

Pero no nos centremos sólo en el tema de las playas, pasa en otros sectores, que queremos romper el monopolio de los hoteles, abramos las puertas al alquiler vacacional, recaudamos más, les hacemos un siete a los hoteleros y bueno, si se van a la calle unos cientos de mallorquines, no pasa nada.

Si algunos beben de forma irresponsable, subimos el alcochol con más impuestos, si nos pasamos del presupuesto ponemos el centimo sanitario y suma y sigue.

Y a esto se le llama gobernar, ya les adelanto que esto no va a parar aquí, en el momento que decaigan los ingresos que está teniendo el Gobierno por esta reactivación, nos volveran a meter la mano en el bolsillo. Mientras tanto ¿que se hace para cambiar el modelo productivo, la dependencia energética o fomentar la investigación?

Hay un dato inquietante que ha salido hace unos días, el consumo interior ha tenido una bajada, cuidado que mucha gente se está dando cuenta que todo esto es muy artificial, que no hay medidas de futuro y que sus sueldos no se van a poner al día en mucho tiempo. La confianza en nuestros políticos se ha degradado a límites insospechados y esto es caldo de cultivo para demagogos y populistas.

La subida de impuestos tienen que ser la última solución de un político, no la primera, porque el dinero de los contribuyentes es sagrado, tanto o más que el del Estado.