"Se seguirá el mismo procedimiento de siempre", explica a mallorcadiario.com un portavoz de Cort. "Una vez llegue la documentación de la Policía Nacional, que es quien tiene la las entradas, se tramitará el expediente correspondiente".
Éste implica una sanción económica, como ya ha ocurrido anterioremente: hace medio año, la multa ascendía a 10.000 euros por la "reiterada y reincidente" de menores.
"La ley debe hacerse cumplir, también a los organizadores de actividades donde el principal reclamo es la tortura de los animales. Cort no puede mirar hacia otro lado y debe hacer cumplir la normativa vigente", son palabras de Neus Truyol en 2014. Més per Palma recordaba que se "vulnera de forma clara la ley 7/2013 de 26 de noviembre, art. 103f que indica como hecho grave el acceso a menores de 16 años en actividades de este tipo. Asimismo también se infringe el artículo 4.3 de la ley de protección animal de la CAIB 1/1992".
Por todo ello, el movimiento antitaurino exige que se cumpla la ley "sea quien sea".