Esperança Camps ha presentado oficialmente ante la presidenta del Govern, su dimisión como consellera de Participació, Transparencia i Cultura. Tras dar las gracias al Govern por su confianza al nombrarla, Camps ha explicado el porqué de su decisión.
Camps ha cargado duramente contra su equipo en la conselleria a los que ha acusado de filtrar rumores y mentiras fuera de la sede de la conselleria, todos ellos en su contra.
Camps ha explicado que "comprobar la deslealtad de la gente con la que tengo que trabajar cada día no es aceptable. Ver cómo estas personas esparcen rumores fuera de la conselleria no se puede aguantar por muy grande que uno tenga el hígado".
La ya exconsellera ha relatado su decisión, y ha destapado que es una decisión pensada y meditada. La semana pasada ya se lo comunicó a Mes per Menorca, pero ha esperado al Consell de Govern de este viernes donde se aprobaba la Oficina Anticorrupción para dar el paso definitivo.
Camps ha dicho que no se va de la conselleria "por faltas de ganas de seguir y de motivación. Lo dejo porque se ha roto la confianza con el partido que me propuso para este cargo. No he encontrado el apoyo que esperaba. Filtraciones de acusaciones o temas que no eran más que rumores malintencionados. No he encontrado en ningún momento el apoyo que esperaba de mis compañeros", en una clara alusión a los miembros de Més per Menorca.
Tras un repaso a su trabajo en la conselleria, ha dado paso a la autocrítica, de nuevo con un ataque directo a su equipo en la conselleria. "He cometido errores seguro. Enrtre ellos haber confiado en los miembros de mi equipo para llevar adelante el trabajo de la conselleria, pero que al final me han decepcionado".
Finalmente ha querido dar las gracias a todos los miembros del Govern por haberle dado su confianza para iniciar su trabajo en la conselleria.