La Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Santanyí con la ayuda de la Sociedad de Cazadores de Santanyí han llevado a cabo durante las dos últimas semanas las tareas de exterminio de las bolsas de orugas que se acumulan principalmente a los pinos.
Una campaña que llevan a cabo conjuntamente desde hace más de una década. Este año se han utilizado hasta 4.000 cartutxos.Tot embargo, debido a la falta de lluvias, se continuará trabajando para erradicar esta problemática definitivamente.
Principalmente se han dirigido a las zonas más afectadas, como son las de Cala d'Or o las de Cala Figuera. También en las escuelas, ya que los más pequeños son los que normalmente se ven más afectados por las urticarias que provocan las orugas.
El sistema que utilizan es el de disparar contra las bolsas de orugas que tanto daño hacen a los pinos y que tan peligrosas pueden resultar de cara a los humanos, causando graves alergias o enfermedades. Con este mecanismo, se aseguran de que el impacto sólo ataca al proceso reproductivo de la especie y, ni los árboles ni los animales sufren ningún tipo de consecuencia.