El director de Lo Imposible, Juan Antonio Bayona, no tuvo un buen final en la gala de los Goya, a pesar de llevarse a casa cinco estauillas, entre ellas, el premio como Mejor Director. ¿La razón? las prisas con las que fue a entregar la estatuilla a María Belón, protagonista real de la historia en la que se basa su cinta.
El director tropezó en el tramo entre el escenario y las butacas y se lesionó provocándose una rotura fibrilar en el gemelo, por lo que acabó su noche triunfal en una ambulancia del Samur.