La economía montada en torno a la inmigración en Mallorca ya ha adquirido un nuevo estadio. Attijariwafa Bank, el segundo banco más grande de Marruecos tras Banque Populaire, abrió su primera sucursal en Palma hace unas semanas. Está situada en la Costa de Ses Germanetes, a apenas unos minutos de la Oficina de Traducción Jurada de la Travesía de Jesús.
Las ventajas que obtienen los marroquíes con este banco es la ayuda en la gestión de su dinero en su país de origen, con, según reza en su propio portal web “soluciones de transferencia adaptadas a las necesidades de cada uno así como la posibilidad de solicitar la suscripción de productos bancarios en Marruecos desde su país de residencia”.
Attijariwafa Bank es fruto de la fusión del Banque Commerciale du Maroc y el Wafabank. El accionista mayoritario es el holding Groupe ONA, controlado por la familia real alauita, aunque el accionista de referencia internacional es el Grupo Santander.
La entidad, que posee más de un millón y medio de clientes, cuenta con oficinas en París, Bruselas, Shanghái, Túnez y Dakar entre otras, y en España ya ha abierto sucursales en Madrid (2), Bilbao, Málaga, Almería, Murcia, Alicante, Valencia, Tarragona, Barcelona, Girona y Mallorca. Prueba de su expansionismo en España es que hace apenas un año sólo contaba con dos sucursales en nuestro país: las de Madrid y Barcelona.