Con el nombramiento de Antoni Mesquida como nuevo responsable de la salud balear, José Ramón Bauzá ha ganado talla política. A Mesquida lo han puesto los médicos. Bauzá ha aceptado. Bauzá ha aprendido. Bauzá no quería consellers con perfil propio. Bauzá quería a Sbert. Pero el president acabó accediendo a la petición de los médicos. !Claro! Ha aprendido que con consellers con perfil propio y defendidos por el sector, él no se quema. O no se quema tanto como se ha quemado hasta ahora.
Bauzá había "tocado" a Federico Sbert. Mismo perfil que la mayoría de lo visto hasta ahora en el Consell de Govern. Hasta el nombramiento de Mesquida, el president del Govern había mantenido la línea de rodearse de bajo perfil y asumir él lo bueno y lo malo de la gestión. Ha recibido demasiados palos. De ahí la bronca a algunos consellers durante el encierro de hace unas semanas.
Sbert se ha quedado con las ganas, pero Bauzá ha aprendido. Ahora, a otra cosa. La remodelación no ha acabado......