La impresionante maniquí rusa ha adelantando en exclusiva y de primera mano su trabajo con la edición italiana de Vanity Fair. El objetivo de Alan Gelati ha sido el encargado de captar los encantos de Irina.
Unas imágenes en blanco y negro que han podido ver en primicia las más de 300.000 personas que siguen su perfil a través de Facebook.
Una nueva sesión en la que Irina ha demostrado por qué es una de las mujeres más deseadas del planeta. Su despampanante figura y su fotogenia no hacen más que aderezar una belleza que cautiva dentro y fuera de las pasarelas.
La rusa ha subido la temperatura de las redes sociales aunque y puede que muchos no se quiten de la cabeza esas sinuosas curvas que duermen en la misma cama que CR7.