El sainete de Utz Claassen vivió ayer otro episodio más en esta batalla iniciada por el consejero alemán. Claassen, que todavía no ha superado el varapalo judicial del pasado viernes, obligó a Jaume Cladera a suspender la Junta General de Accionistas prevista para ayer por un error en la forma de convocarla.
Claassen decidió no presentarse a la Junta, bajo el pretexto de que esta no había sido publicada en ningún medio de comunicación, como obliga la ley, y que por tanto no estaba informado de la convocatoria de la misma.
La ausencia del aleman obligó a Jaume Cladera a posponer la Junta hasta una nueva fecha. El presidente del club bermellón, en rueda de prensa, ha confirmado que era cierto que no estaba convocado en la prensa, pero ha puntualizado que el consejero alemán estaba perfectamente informado de la misma.
Otro episodio más el vivido en la sala noble del Iberostar Estadio y que no sirve más que para empañar la buena temporada que el equipo esta realizando y para proyectar una imagen negativa del club al exterior.