No arroja la toalla- Después de la desestimación de la querella de Utz Claassen contra Serra Ferrer y Jaume Cladera por el sobrecoste en la compraventa de un 10% del paquete de acciones del conjunto bermellón, el teutón anuncia que piensa recurrir.El juez Enrique Morell, del juzgado de instrucción número 9 de Palma, considera que hay "falta de fundamento y consistencia" en la querella presentada por el alemán y que se trata de "acusaciones caprichosas y con mala fe" como para seguir adelante con la querella. Además, obliga a Claassen a pagar las costas del proceso.
El revolcón ha sido mayúsculo para el alemán que a lo largo de este 2012 ha pregonado a los cuatro vientos que tanto Serra Ferrer como Jaume Cladera se aprovecharon de su buena voluntad para estafarle en la compra de las acciones.
Claasen que reclamaba una indemnización de 600.000 euros a los dos dirigentes bermellones tendrá que pagar ahora las costas del proceso judicial aunque la sentencia no es firme y cabe recurso de apelación contra el mismo que se presentaría ante el mismo juez.