BANYARRIQUER

Los deseos y la realidad de los trabajadores de Spanair

Jueves 09 de febrero de 2012

“¿Trabajar en Ryanair? Así, no”. Este era un titular de ayer de El Mundo en Baleares. Reflejaba el sentimiento de los trabajadores de la compañía Spanair, que se encuentran con que las ofertas de trabajo de la empresa irlandesa son bastante menos interesantes que lo que tenían hasta ahora.

Aquí hay dos formas de ver las cosas: de un lado, los trabajadores acaban de concluir su relación con una empresa deficitaria, pero relativamente seria, con un modelo bien estructurado, donde los salarios pretendían competir con Iberia y no con Ryanair o Easyjet.

Del otro lado está la realidad del mercado: los ciudadanos, incluso los que más critican a las compañías de vuelos baratos, son sensibles a viajar por la cuarta parte de lo que cuesta una compañía de bandera y, por ende, cambian de operador. Así, pues, los servicios de las low cost son cada vez más demandados y, en un futuro no muy lejano, habrán desplazado totalmente a las empresas tradicionales.

¿Qué se puede hacer ante esto? Nada. O se acepta el modelo de mercado que significa que estas compañías serán las que funcionen o se rechaza y se va a un modelo intervencionista condenado a la muerte.

Los trabajadores de Spanair tendrían razón si no hubiera nadie cualificado dispuesto a ocupar las plazas de Ryanair. Pero, con más de cinco millones de parados, Ryanair y cualquier otra empresa, pueden elegir y seleccionar. Así que, lamentablemente, me temo que hay paro para un tiempo.

TEMAS RELACIONADOS:


Noticias relacionadas