Para el director general de Salud Pública y Consumo del Govern, Federico Sbert, "los cambios en las tendencias en nuestro entorno preocupan a los profesionales de la salud" pero hay medidas que dependen "directamente" de la población: "Seguir las recomendaciones de vacunación y no retrasar su aplicación si no es estrictamente necesario", ha destacado.
Los datos registrados en Baleares van en consonancia con los registrados en Europa, que ascendieron a más de 30.900 casos desde enero y hasta diciembre de 2011. En España, desde enero a octubre de 2011, se registraron 1.876 casos de sarampión.
Según el estudio Monitorización mensual del Sarampión en Europa' (EMMO, por sus siglas en inglés), del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), en primavera, se registraron 23 casos de sarampión en siete brotes independientes registrados en la zona del País Vasco más próxima a Francia, que no registraba casos desde 1997.
Según Sbert, "todos los niños deben ser vacunados para mantener las altas tasas de inmunidad" y en el caso de los adultos, "se debe reforzar intensamente la vacunación en el personal de las guarderías" y de los hospitales, "no sólo para protegerlos, sino para evitar que infecten a otros pacientes".
El director ha expresado su preocupación por los cambios que "se han dado en los dos últimos años", ya que desde hace tiempo "la elevadísima tasa de vacunación" había impedido "una mayor difusión de la enfermedad".