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El Consell Insular de Mallorca se viste de gala para celebrar su 'Diada'

LA OPOSICIÓN 'CASI' ABANDONA EL TEATRO PRINCIPAL EN PLENO DISCURSO DE SALOM

Sábado 13 de septiembre de 2014
Un año más el Consell Insular de Mallorca, presidido por Maria Salom, ha sacado del armario sus mejores galas para celebrar la 'Diada de Mallorca'. Una fecha muy especial en la que se conmemora el juramento de Jaume II de la Carta de franquicias y privilegios de Mallorca hace ya 8 siglos.

Y un año más, desde que empezó la crisis, la institución insular ha sacado sus mejores galas, en cuanto a 'dress code' se refiere, pero también las más austeras pues se ha cumplido lo vaticinado hace días. Se prometió una fiesta austera y así ha sido. Ni copas de vino, ni cava, ni siquiera unas almendritas. Nada. La crisis la vivimos todos y así quiere el Consell dejarlo claro.[gallery link="file" ids="6353,6352,6351,6350,6349,6348,6347,6346,6345,6344,6343,6340"]

Una declaración de intenciones que no sólo hemos visto en los gestos, sino también en las palabras. La presidenta, Maria Salom, ha dejado ver, no sólo un bonito vestido negro de cocktel, sino también su faceta más electoral. Con un discurso de más de 40 minutos y con unas elecciones a unos meses vista, la presidenta ha querido transmitir tres mensajes: que ahora, a pesar de no haberse solucionado todos los problemas, "estamos mejor que hace tres años"; que se encontró con una institución similar a un "enfermo terminal" al que su gestión ha conseguido "salvar" y que en breve su partido se presentará a las elecciones con "los deberes bien hechos".

Palabras que a los partidos de la oposición no parece haber sentado bien. Es más, tal y como ha podido saber mallorcadiariovip.com, los invitados del Partido Socialista a la Diada, han estado a punto de abandonar el en pleno discurso de Salom. Algo que, si no han hecho, es por "respeto institucional". Según fuentes del partido socialista, las palabras de la presidenta han sido "una vergüenza" ya que "esta mujer ha confundido la institución con su partido". Sin embargo, y a pesar de las típicas rencillas entre políticos que gobiernan y políticos que quieren gobernar, la Diada se ha celebrado sin incidencias y envuelta en un ambiente de lo más VIP y agradable.

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