EDITORIAL

Noguera está cansado

Martes 18 de agosto de 2015
El primer teniente de alcalde de Palma y concejal de Modelo de Ciudad, Urbanismo y Vivienda Digna, Antoni Noguera, se declaró cansado en las redes sociales. “Cansado de la actitud victimista y catastrofista de los grandes hoteleros”, dijo literalmente en su perfil de Facebook. Por lo que se ve, el líder de Més en Palma tiene poca resistencia y se cansa pronto. Con tan poco aguante y capacidad de oír los argumentos contrarios a sus tesis, es previsible que asuma la alcaldía de la ciudad en 2007 cercano al agotamiento, lo que debiera invitarle a meditar acerca de si está preparado para asumir el cargo y suceder a José Hila, alguien bastante más cauteloso en sus manifestaciones públicas y mucho menos sectario.

Noguera rogó a los turistas que no quieran pagar entre 0,6 y 2 euros al día, que se queden en su casa. Con estas declaraciones demuestra desconocer la industria turística en general, pues el quid de la cuestión es que se obligue a los hoteleros a recaudar una  tasa, especialmente cuando los precios ya están cerrados con los turoperadores y cualquier modificación va a la espalda de los hoteles. Además Noguera también demuestra tener una especial inquina hacia los “grandes hoteleros” y aquí convendría que explique a quiénes considera incluidos en este calificativo y a qué hoteleros no.

Curiosamente, Noguera carece por completo de toda competencia en materia de impuestos turísticos y sus declaraciones, por más que completamente legítimas, se enmarcan en una cuestión que se escapa a su ámbito de gestión. Quizás sería más apropiado que Noguera se centrase en atender los asuntos que acaparan el hartazgo de los habitantes de Palma y sobre las que, aquí sí, él tiene competencia y no poca.

Al joven edil seguro que no se le escapa que los palmesanos y palmesanas están hartos de la suciedad que está presente en cualquier lugar de la ciudad, o por el ruido que hace la vida imposible a tantos vecinos, o las plantillas de agentes de Policía Local completamente insuficientes para vigilar la conflictiva Playa de Palma, o las dificultades de los jóvenes para conseguir una vivienda y así poder emanciparse, o las tasas e impuestos municipales con los que el consistorio asfixia a los ciudadanos y a los comerciantes, o el deficiente transporte público... ¿Por qué no se entrega el teniente de alcalde Noguera a solucionar todos estos problemas, antes de meterse en camisas de once varas y participar en debates tan alejados de sus competencias? Seguramente porque mientras se habla de ecotasa, no se habla de la situación de abandono que sufre el antiguo canódromo, o la cárcel vieja, o son Busquets, o Son Dureta, o el edificio Gesa, o los asentamientos chabolistas del cauce de Sa Riera, o la ausencia de solución para el Palau de congressos, o la degradación de El Terreno, Gomila, Cala Mayor, etc.