Viernes 05 de junio de 2015
El empecinamiento de Génova13, la sede nacional de Partido Popular, en poner trabas a la celebración de un Congreso Extraordinario del PP de Balears conforme al anunció del presidente del partido, José Ramón Bauzá, como instrumento estatutario para proceder a una renovación de los órganos de dirección tras el varapalo electoral, aboca a esta formación a una situación de extrema tensión interna.
La dirección nacional de los populares debiera entender que es necesario buscar una solución dialogada y evitar el enfrentamiento. Además, lo razonable sería ofrecer una salida digna a Bauzá, evitando divisiones y bandos vencedores y vencidos. Al fin y al cabo, no hay un único culpable de esta situación y la responsabilidad ha de compartirse, pues no cabe duda que el electorado también ha castigado en estos comicios muchas de las decisiones adoptadas por el Gobierno que preside Mariano Rajoy, presidente nacional del PP. En este contexto, seguir forzando la situación es irresponsable.
Es hora de dar la voz a la militancia del PP balear para enderezar el rumbo en lo que sea necesario y así se acuerde por la mayoría, con la elección de una nueva presidencia regional cuanto antes mejor, proceso para el que Bauzá se ha autodescartado asumiendo su responsabilidad a las pocas horas de concluido el escrutinio.
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