Ferran Martínez | Lunes 02 de marzo de 2015
Para los que llevamos más de 25 años aguantando los “debates sobre el estado de la nación”,llega un momento en que nos sentimos hartos de lo mismo y engañados. Nos preguntamos qué hicimos mal para llegar a parir a semejantes monstruos de la política. Porqué hemos confiado y permitido que sigan creciendo en la política engendros que no dan la talla.
Sobre el “ring”, y a la izquierda, el aspirante Sánchez . Críticas, reproches y acusaciones voz en grito. A la derecha Rajoi. Quien en vez de mantener el pulso y defender el título, se exasperó y llegó a perder las formas:“no vuelva usted aquí a decir nada, ha sido patético”.
Como comprenderán, me estoy refiriendo al esperpéntico debate sobre el “Estado de la Nación “.
Dos púgiles, Rajoi-Sánchez, saltaron al ring sin que hubiesen dado en la báscula el peso que minimamente exigimos los votantes. Se enfrentaron, en un combate absurdo, sin más emoción para los invitados, que ver la inútil sarta de garrotazos que se endiñaban el uno al otro.
A los españoles, no nos da la risa, y menos nos entretienen estos enfrentamientos, porque no llevan a nada y porque no es momento de más desencuentros, entre dos rivales, que creen dar la talla.
Hubo pelea y al final, los jueces del CIS, otorgaron una pírrica victoria a los puntos para el Secretario socialista, si bien para muchos fue más de lo mismo, ni siquiera hubo sorpresa, ni magia, ni un mensaje nuevo que llevarnos a la boca, con lo que muchos de nosotros les damos un suspenso cum laude.
Mientras los dos, se quitaban a tiras lo que llevan prestado, fuera, “noveles aspirantes” preparaban a la afición para intercambiar flores en el mes de Mayo con otros “ciutadans”
El votante, tiene hambre de verdad, de regeneración, de colaboración, de que pacten y no peleen más. Ellos, no se enteran, nos sirven refritos y más refritos, en menús vomitivos, bazofias políticas que no tragamos.
Vaya dos pelmazos. Suerte que en el Hemiciclo, mejor decir graderio, habitan gentes como Celia,la Villalobos, que puso la gracia y nos entretuvo un rato. Qué feliz estaba, jugando con la consola al “Candy Crush “, mientras sustituía en la tribuna al Presidente de la Cámara . Villalobos, Celia, que el Parlamento Español no es de juguete y allí no se va a jugar ni a distraerse hasta la hora de la comida o la cena . Que el Parlamento, ni es una Villadelobos, ni un Cortijo, ni una guardería de zánganos, aunque lo parezca. Estás ahí , porque os han mandado los votantes, para que trabajes y atiendas y no para que juegues y te entretengas con los caramelos.
El “caloret” de estos días de “fallas”, seguramente propiciarán que abandonemos casposos monumentos de la política, que se han convertido en trastos viejos e inservibles , que, sin indulto posible, deberíamos abandonar en el “caloret de las falles”.
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