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En el PP hay mucho debate sobre la intención de los rodriguistas de convocar unas elecciones primarias en el seno del PP-Palma para derrocar de manera interna al alcalde,
Mateu Isern. Fuentes del partido consideran esta apuesta una
"aberración política e incluso juridica inaceptable para Madrid". Las elecciones primarias, en todos los países que las realizan y en todas las instituciones, se llevan a cabo para designar candidatos cuando se está en la oposición, "pero jamás se puede someter a un cargo púbico, elegido por las urnas, a un nuevo proceso interno cuando opta a la reelección. ¿Alguien se imagina a Obama o a Hollande presentándose a unas primarias una vez elegidos presidentes? ¿Alguien se imagina a Rajoy teniendo que pasar por unas primarias para volver a ser candidato? Es de locos", afirman estas fuentes.
En Balears, los socialistas han realizado numerosas primarias, pero si ganan las elecciones ya no se realiza este proceso hasta que regresan a la oposición. Así pasó con
Antich y con
Calvo, que se presentaron a la reelección sin pasar por primarias, conforme a los estatutos del PSOE. Este partido tiene regulados estos procesos, pero el PP no. Se da por seguro que Madrid "jamás dará luz verde a un proceso primario interno contra un presidente de institución elegido por las urnas. Eso no ha pasado jamás".
Estas mismas fuentes destacan que "la amenaza de primarias imposibles forma parte de la
presión contra Isern para que renuncie a volver a ser candidato.
El serlo o no serlo depende de él. Solamente si ve que tiene al grueso del partido en contra y decide irse a su casa por propia voluntad el proceso sería legítimo. Aquí sólo vale la voluntad propia". Por eso otro elemento de presión contra Isern sería que el partido le haga la lista electoral de cabo a rabo, dejándolo como un
florero sin ningún peso específico en su propio consistorio. La presión rodriguista va dirigida a poner puyas y pegr picotazos para conseguir que Isern haga público que no se presenta.
La incógnita es saber cuando "surtirá efecto" el desgaste al que es sometido. Además, el
pressing contra proviene también de la cúpula del PP Balear, donde se considera que el alcalde "va por libre y desarrolla su tarea de espaldas al partido".