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El Mallorca atraviesa una grave crisis en el terreno de juego, en la planta noble y ahora, también, entre los aficionados. Si hace unas semanas la controversia saltaba entre los que apoyaban no entrar a Son Moix y los que defendían la necesidad de apoyar al equipo
in situ, ahora los roces surgen por el "protocolo" de actuación ante el Tenerife.
La plataforma
Junts pel Mallorca, con sus dos estandartes al frente, congregó este miércoles en la sala de prensa del Iberostar Estadi a penyes y supporters para proponer y votar ideas a desarrollar este domingo.
La idea fue finalmente acogida por la mayor parte de los asistentes pero muchos de los
supporters abandonaron la sala antes de la votación. "A mí nadie tiene que decirme cómo animar a mi equipo", murmuraron algunos de ellos mientras salían.
Otros tantos del mismo grupo criticaban la "laxitud" de crítica de Junts pel Mallorca respecto a un individuo en concreto de la directiva: Biel Cerdà. "Contra la directiva y
nosotros si que señalamos a uno #bielcerdavestenja #directivadimissió" han escrito en su cuenta de Twitter.
Lo cierto es que la plataforma Junts pel Mallorca ha afirmado desde el primer momento que nacen de la iniciativa "popular", que no tienen a "nadie" detrás moviendo los hilos y que su único propósito es "unir a la afición".