EDITORIAL

Estocada a la compraventa de coches entre particulares

Martes 14 de enero de 2014
La decisión del Govern Balear de aprobar un altísimo impuesto a la compraventa de vehículos entre particulares supone un golpe mortal a estas actividades, que tienen mucho sentido en tiempo de crisis económica, cuando se junta la necesidad de vender por parte de unos y la de comprar a bajo precio por parte de otros. Eso se ha acabado con impuesto que grava la operación por regla general en más de mil euros.

Esta voracidad recaudatoria genera muchísimos más perjudicados. Además, resulta impensable pensar que esta ocasión se pueda acudir a la pseudopicaresca de contratos privados o similares. Un vehículo mal vendido puede causar un serio disgusto a su anterior propietario en caso de un accidente o cualquier tipo de vulneración de la normativa vigente por su nuevo usuario. Con los coches no valen las frivolidades o las ligerezas. Es demasiado peligroso.

Pero de la misma manera el Govern Bauzá debería ser mucho más sensible con sus ciudadanos y no imponer este tributo, únicamente en vigor en el Archipiélago, que supone un duro golpe a la actividad privada.  No hay nada más contraproducente en toda acción pública que el abuso de los impuestos, sobre todo cuando interfieren de manera prácticamente determinante en una actividad beneficiosa para los segmentos sociales medio bajos en tiempo de crisis.

Es más, se trata de un tributo tan abusivo que todo hace pensar que reportará pocos ingresos a las arcas de la comunidad. Perjudica mucho amchos ciudadanos y aporta poquísimo al interés general. Es contraproducente.

 

Noticias relacionadas