¿Reunión secreta entre la cúpula de Salut y Bennàsar?

Me cuentan -y me lo creo porque la persona que me lo dice es absolutamente fiable- que se ha celebrado una reunión “secreta” entre la consellera de Salut, Carmen Castro; el director general del Ib-Salut, Juan José Bestard, y el jefe del Servicio de Traumatología de Inca y presidente del Colegio Oficial de Médicos de Baleares, Antoni Bennàsar, para hablar de todo lo sucedido durante los últimos días. La reunión, de la que nada ha trascendido y que oficialmente parece no haber tenido lugar, aunque hay alguna que otra persona que los ha visto, se celebró a las 13 horas y, aunque todos callan, con lo que, naturalmente, se provocan más y más especulaciones, parece ser que se ha intentado “cerrar” el capítulo de la auditoría, el cese, el contra-cese, el penoso y lamentable espectáculo dado, en definitiva, de una forma airosa para todos. Hay quien habla de que las presiones recibidas desde el PP de Inca han obligado a Bestard a dar marcha atrás, a quedarse con "el culo al aire" y a quitarle toda autoridad, le han hecho muchísimo daño, porque su imagen ha quedado muy dañada. Y no es que la consellera Carmen Castro se haya ido “de rositas”, que tampoco, porque ese “defecto de forma” no se lo cree ni ella, ya que el director general del Ib-Salut está perfectamente facultado para destituir a Bennàsar. Otra cosa, es que haya querido salir airosa de un asunto del que difícilmente se puede salir. Pero es que la imagen de Bennàsar tampoco es que haya quedado impoluta, porque sigue habiendo muchas dudas sobre varios puntos de la auditoría y los comentarios acerca de sus idas y venidas, en horario laboral, tampoco le dejan en muy buen lugar. El daño está hecho, las dudas son cada día mayores y la versión de que a la historia se le quiere dar un “cierre político” es la más extendida, por lo que la reunión, que oficialmente no ha existido, estaría dentro de este ámbito. Pero que nadie se llame a engaño, ya que todavía no se ha escrito el último capítulo de este culebrón y hay muchos cadáveres por el camino, que están dispuestos a “resucitar”.