Beber alcohol en la calle, tomar el fresco o intentar huir, entre las 13 detenciones por desobediencia

Por su parte, la Policía Nacional arrestó al mediodía a otro ciudadano reincidente de 37 años en la calle Manacor, en Palma. El hombre consumía alcohol en la vía pública. Los agentes comprobaron que se le había propuesto para sanción en nueve ocasiones y que había sido detenido dos veces. A esa misma hora, otro ciudadano de 45 años fue arrestado en la zona de la Porta de Sant Antoni, después de llevar más de dos horas bebiendo alcohol en la calle. Tras ser identificado tres veces y constatar que se le habían levantado tres actas por desobediencia, acabó detenido. Por la tarde, la Policía Nacional arrestó a un hombre de 49 años en el barrio de Son Gotleu, después de ser sorprendido circulando en bicicleta junto con otra persona, a la que se le levantó un acta. El ciudadano había sido denunciado con anterioridad por desobediencia tres veces.

En Eivissa, la Policía Nacional detuvo esta madrugada a un hombre de 31 años y una joven de 22 años cuando caminaban juntos por la calle sin causa justificada. Ambos habían sido propuestos para sanción varias veces. Los agentes arrestaron también de madrugada a un joven de 19 años con una detención anterior y cuatro actas por desobediencia cuando transitaba sin motivo justificado por la calle y a otro ciudadano de 37 años que circulaba en bicicleta por la vía pública incumpliendo el confinamiento. Horas antes, el jueves por la noche, un hombre de 49 años fue sorprendido paseando con otra persona. Le constaban dos denuncias anteriores por desobediencia, por lo que acabó arrestado. La Policía Nacional detuvo a otro ciudadano de 41 años ayer por la tarde cuando caminaba por un acantilado cerca del mar en las inmediaciones de la calle Ramon Muntaner, en Eivissa. El hombre alegó que se le había escapado su perro y que era vecino de la zona, lo que no era cierto. Trató de huir de los agentes corriendo, pero fue alcanzado. Se mostró muy agresivo y se enfrentó a los policías, por lo que tuvo que ser reducido.

Por último, la Policía Local de Eivissa arrestó ayer por la tarde a un hombre de 44 años por resistencia y desobediencia, tras ser sorprendido realizando unas obras sin licencia dentro de un local en donde presuntamente trabajaban al menos otros tres hombres sin contrato. El ciudadano no permitió acceder a la zona a los agentes e hizo caso omiso a sus indicaciones. Los funcionarios policiales también le propusieron para una sanción administrativa.

Por otro lado, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado continúan este viernes con los controles en puertos, aeropuertos y en las carreteras del archipiélago. El aeropuerto de Son Sant Joan, en Palma, registró ayer la llegada de 103 pasajeros, mientras que otros 232 abandonaron Mallorca en los 12 vuelos que operaron, según los datos de la Guardia Civil. El aeródromo de Eivissa recibió 44 viajeros en dos vuelos de entrada y otros 31 se marcharon de la isla en dos vuelos de salida. El aeropuerto de Menorca contabilizó a 31 personas que llegaron y otras 16 salieron de la isla en seis vuelos programados.

La Guardia Civil está realizando hoy varios macro controles en vías principales para evitar desplazamientos innecesarios y traslados a segundas residencias durante la Semana Santa.

La vigesimoséptima jornada de restricciones está transcurriendo hoy sin incidencias relevantes en el archipiélago. La Delegación del Gobierno en Illes Balears agradece la colaboración de la ciudadanía durante estos días, pero advierte de que no podemos relajarnos en la lucha contra el coronavirus. Insiste en que el confinamiento es nuestra máxima protección frente a la pandemia, además de seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias.