Carta del Director General de Turismo a los medios de comunicación

SOBRE LA CONTRATACIÓN DE LOURDES REYNÉS

Por Jaime Martínez Llabrés, Director General de Turismo.

Ante las noticias y comentarios aparecidos estos últimos días en los medios de comunicación sobre la contratación de Dª Lourdes Reynés en la Consellería de Turismo y Deportes del Gobierno Balear, por haber vivido todo el proceso de su contratación en primera persona, tanto en mi condición de Director General de Turismo como de amigo personal del Conseller Carlos Delgado, quiero hacer las siguientes aclaraciones:

1. Tras mi nombramiento como Director General de Turismo en Junio de 2011, el Conseller de Turismo y Deportes y yo iniciamos, entre otras, la tarea de realizar los nombramientos de los cargos políticos que debían sustituir a los realizados por parte del gobierno saliente.

2. Entre los nombramientos que debíamos realizar figuraba el de Director de Relaciones Institucionales del consorcio de la Playa de Palma, consorcio del que el Conseller es Presidente.

3. Tras analizar muchos currículums, decidimos que el de Dª Lourdes Reynés, reunía el perfil apropiado para el cargo que precisábamos ocupar. Sin duda, su formación era infinitamente superior a la persona que ocupó dicho cargo en la anterior legislatura. Su dominio del inglés, el francés y el italiano, aparte de los cooficiales de nuestra comunidad autónoma, y su experiencia laboral en dos periódicos nacionales, sin duda fueron determinantes a la hora de tomar esa decisión.

4. Tras la entrevista de rigor, el día 18 de Julio de 2011, Dª Lourdes Reynés pasó a ocupar el cargo de Directora de Relaciones Institucionales del consorcio de la Playa de Palma, con un sueldo anual de 50.464 euros, 12.536 € inferior que el que tenía la directora saliente del Gobierno anterior.

5. Carlos Delgado conoció a Lourdes Reynés en la entrevista de trabajo y, en esos momentos, su estado civil era casado. Meses después, se separó (no divorció) legalmente y, con posterioridad, inició una relación personal con la Sra. Reynés, cuyo estado civil era y es divorciada.

6. Ante la vacante surgida en el Departamento de Comunicación y Protocolo de la consellería el 23 de Abril de 2012, se tomó la decisión de que la misma fuera ocupada por la Sra. Reynés, para así poder eliminar (como de hecho se hizo) el cargo de Director de Relaciones Institucionales del consorcio de la Playa de Palma y ahorrar los 50.464 euros anuales de dicha plaza.

7. Como Directora de Relaciones Institucionales del consorcio de la Playa de Palma la Sra. Reynés tenía una retribución anual de 50.464 euros mientras que en su nueva plaza en el departamento de prensa de la consellería iba a cobrar 46.200 euros al año, por lo que se disminuía su sueldo y se disminuía el gasto público.

8. Con dicho cambio se pretendía optimizar recursos ya que la Sra. Reynés debía compaginar su trabajo en el departamento de prensa con las relaciones institucionales del consorcio de la Playa de Palma y del resto de entidades y empresas dependientes de la Consellería de Turismo y Deportes.

9. El pasado lunes día 7 la Sra. Reynés, ante la polémica suscitada, nos manifestó su voluntad de renunciar al cargo por motivos personales.

10. La Sra. Reynés ha perdido su puesto de trabajo al que accedió en julio del año pasado gracias a su currículum y sin conocer al Conseller más que por una entrevista de trabajo.

Así fueron los hechos acaecidos en este asunto, pero, antes de finalizar este escrito quisiera hacer dos puntualizaciones:

1. La Carta de Compromisos del Partido Popular de Baleares que firmamos todos los cargos políticos, establece textualmente en su punto 8 la prohibición de “designar parientes de hasta el tercer grado de consanguinidad o de afinidad para ocupar cargos de libre designación.”

2. Como he señalado, el estado civil del Sr. Delgado es separado y el de la Sra. Reynés es divorciada y su relación de parentesco es de octavo grado en consanguinidad por ser sus madres primas segundas.

Todo lo aquí narrado es cierto. Las valoraciones realizadas con posterioridad ya dependen de la profesionalidad, los sentimientos y la opinión de las personas, reservándome yo mi propia opinión sobre algunas de las mismas.