Este año, arrancar el curso supondrá a las familias de Baleares 406 euros por hijo, lo que supone la vuelta al cole más cara desde que hay registros. Los expertos apuntan a la inflación, que ha provocado la subida generalizada de los precios y que afecta al vestuario y al material escolar; gastos adelantados que se añaden a otros como el comedor o las extraescolares, y que harían ascender la suma a 2.000 euros por niño al año.