Cargador coche eléctrico
Los 880 puntos de recarga que están activos en Baleares generan un coste a los Ayuntamientos de unos 800.000 euros mensuales, a los que hay que sumar el mantenimiento y reparación de los dispositivos. El Govern se plantea ahora cobrar a los usuarios para compensar el gasto que deben afrontar los municipios por ofrecer ese servicio.